Información del producto.
Para consumo durante aprox. 3 meses. Zeolita natural micronizada, color verde pálido, libre de mordenita (componente potencialmente cancerígeno presente en zeolitas producidas y comercializadas en Chile), tamaño de partículas de 10 micras, 320 cápsulas de 365 mg.
Cumple norma chilena y de la Organización Mundial de la Salud de metales pesados y microorganismos (análisis lab. de Universidad n°1 en Chile y Latinoamérica según ranking QS año 2018).
Extraída en yacimiento de mayor pureza en clinoptilolita en (norte) américa. Certificada en Estados Unidos y Canadá.
Fábrica registrada en la Federal Drug Administration (FDA) de Estados Unidos. Producida bajo Buenas Prácticas de Manufactura (GMP).
Pureza analizada por Triclinic Labs de Estados Unidos.
Una aplicación interesante es en la medicina natural humana. Existen publicaciones científicas serias, peer reviewed y en revistas de alto impacto que investigan su uso en desintoxicación del cuerpo humano. Sin embargo, todos estos artículos indican que la clinoptilolita es la única zeolita reconocida como 100% segura para consumo humano, en tamaños de partículas cercanas a las 10 micras.
Cómo funciona la zeolita clinoptilolita?
La zeolita (incluida la clinoptilolita) posee una superficie con carga negativa por lo que, al igual que un imán, atrae a todas aquellas partículas de carga positiva (carga opuesta). Esto le permite atrapar, por medio de un proceso llamado absorción, una gran cantidad de moléculas y átomos en sus poros y superficie. Su porosidad le entrega una mayor área superficial y un área protegida para aquellas moléculas atrapadas, por lo que además, su eficiencia de «atrapamiento» es alta. Moléculas como el ión amonio y, en menor medida, el ácido láctico (ambos producidos en exceso por células cancerígenas), pueden ser atrapados y removidos por zeolitas . Metales pesados como cobre, plomo y zinc también se adhieren a la clinoptilolita y pueden ser removidos . En Febrero de 2016 el Colegio Médico de la Región Metropolitana indicó que el agua potable de Santiago de Chile, que abastece al 80% de los santiaguinos, contiene altos índices de hierro, manganeso, cadmio, plomo y molibdeno . Todos estos metales poseen carga positiva por lo que pueden ser removidos con zeolita clinoptilolita.